¿Qué?
LA SICOTERAPIA es el arte de saber facilitar que la persona pueda ver, comprender e integrar su propia historia y forma de ser desde una perspectiva diferente. Siendo el objetivo, que se superen los conflictos y/o los habituales trastornos sicosomáticos (síntomas) que aparecen en el día a día.
¿Cómo?
EL MÉTODO para la intervención sicoterapéutica es el sicodrama de la escuela de Rojas Bermúdez. Como modelo teórico y técnico, éste permite llegar a todos las problemáticas y dificultades que se presenten en la persona, sea cual sea su situación vital. Se trabaja desde un enfoque de la persona bio-sico-socio-espiritual, englobando todas sus formas de ser en lo mental, lo físico y lo social.
“Los cambios terapéuticos se hacen posibles desde una situación real de espontaneidad”
¿Para quién?
La sicoterapia, desde el sicodrama, permite la intervención en las diferentes etapas evolutivas de la vida, así como en las diferentes sintomatologías que presenta el individuo en cada circunstancia o momento.
INFANTIL
Madres y padres detectan dificultades en sus hijos/as, a menudo, que no pueden ser resueltas por ellos en casa, éstas son motivo de consulta de sicoterapia siendo necesario evaluarlas y determinar su forma de intervención. El abordaje terapéutico específico a seguir se decide en función de cada situación, dificultad y/o síntomas concretos.
“Intervenir desde el propio juego espontáneo del niño/a, liberando sus miedos, potenciando sus propios recursos y creatividad”
ADOLESCENTE
En esta etapa de la vida, en muchas ocasiones, se hace difícil seguir avanzando en el propio crecimiento, surgen obstáculos, malestar y/o confusión. Todo ello es abordable desde la sicoterapia con el fin del bienestar general, la integración social y el logro de metas del momento.
“Descubrir tu propia verdad, quién y cómo eres”
ADULTOS
En la vida adulta, la sicoterapia aparece como un proceso para devolverle a la persona su autonomía personal, abordando los síntomas y mejorando su forma de afrontar la vida en general.
“Reflexionar sobre tu vida para reparar lo dañado, ajustar lo que sientes con lo que piensas y descubrir cómo quieres vivir”
¿De qué modo?
La forma de ayudar a las personas en sus procesos sicoterapéuticos puede ser desde:
- Lo grupal, las familias y las parejas: entender cómo nos vinculamos con los otros, nos permite descubrir nuevas formas posibles de afrontar las relaciones de pareja, familiares y sociales. Permitiendo resolver las situaciones difíciles desde una situación de mayor claridad y seguridad.
- Lo individual, la persona: como manera de autoconocimiento y crecimiento personal en todas sus vertientes, bio-sico-socio-espiritual, como un todo en funcionamiento constante. Desde la intimidad se facilita la solución de dilemas vitales así como la clarificación de cuestiones que dificultan el bienestar cotidiano a una persona (como son los síntomas, en general).
Centro sicodramático de sicoterapia y formación
Desde una perspectiva de equipo entre sicoterapeutas se facilita enormemente el trabajo en la atención de infancia y adolescencia así como en la intervención con familias y parejas, en general. Siendo definitivo el criterio profesional aunado sobre cada situación y motivo de consulta, permitiendo diferenciar las etapas del proceso sicoterapéutico en función de las necesidades concretas.
Disponiendo de espacios sicoterapéuticos diferenciados, se dota a cada persona o díada de su propio territorio de intimidad. La experiencia nos demuestra cada vez más que cuanta más claridad existe en la organización del abordaje terapéutico, mejores logros se consiguen.